El opositor Maikel Herrera Bones, integrante de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), cumple este lunes once días en huelga de hambre. Herrera ha sido ingresado en el hospital de la unidad policial de 100 y Aldabó, en La Habana.
Yoel Parsons, primo de Herrera Bones, dijo a Radio Martí que tras suspendérsele el juicio el pasado jueves, el cargo de "desacato" ha sido sustituido por "atentado", y aún se desconoce la fecha de juicio.
Mientras, los familiares no han podido visitarlo. "No lo dejan ver. La mujer no ha podido verlo", aseguró Parsons.
El activista de UNPACU "no ha querido comer" desde que fue detenido, asegura su primo, aunque la familia tiene poca información sobre lo que ha sucedido en más de una semana de encierro. "Como está plantado, no tiene beneficios", explicó.
Parsons dijo que este lunes se entrevistará con el instructor del caso, "a ver qué cambio puede haber en esa situación".
La comunicadora independiente Iliana Hernández hizo un llamamiento en Twitter a las autoridades judiciales cubanas para que no sean cómplices de las arbitrariedades del Ministerio del Interior en el caso del activista.
Hernández, quien reconoce que su primer pensamiento es para un luchador por la libertad de Cuba como Herrera Bones, asegura que el activista está preso con una causa inventada, y concluye que se trata de un hombre inocente a quien quieren condenar injustamente.
Herrera Bones protesta por la arbitrariedad de las acusaciones en su contra. El activista, paciente de VIH, fue detenido el pasado 16 de abril por discutir con un supuesto agente policial que no se identificó e iba vestido de civil.
El agente arrestó al activista durante una protesta en su vecindario, en La Habana, por la falta de servicio eléctrico en medio de la pandemia de coronavirus.
(Incluye reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
