A pesar de que la Constitución estipula la libertad de conciencia y religión, y prohíbe la discriminación basada en la religión, el régimen cubano continuó usando amenazas, detenciones, violencia y otras tácticas coercitivas para restringir ciertos grupos religiosos y las actividades de líderes y seguidores, dijo este miércoles el Departamento de Estado de EEUU en su Reporte Internacional de Libertad Religiosa correspondiente a 2019.
Según declaraciones de la organización de defensa de los derechos humanos Christian Solidarity Worldwide (CSW) y líderes religiosos en la isla, el Partido Comunista de Cuba (PCC), a través de su Oficina de Asuntos Religiosos (ORA) y el Ministerio de Justicia, continuó controlando la mayoría de los aspectos de vida religiosa en la isla.
Tras la aprobación de la constitución en febrero de 2019, que fue criticada por algunos grupos religiosos, el gobierno aumentó la presión sobre los líderes religiosos, incluso a través de la violencia, las detenciones y las amenazas. Las autoridades, añade la organización, restringen el derecho de los prisioneros a practicar la religión libremente y limita o bloquea los viajes internacionales y nacionales por motivos religiosos, según informes de CWS citados en el reporte.
Los medios de comunicación y los líderes religiosos dijeron que el gobierno intensificó el acoso y detención de miembros de grupos religiosos que abogan por una mayor libertad de culto y política en el país, incluida la líder del movimiento opositor femenino Damas de Blanco, Berta Soler Fernández, el activista por los derechos cristianos Mitzael Díaz Paseiro, su esposa y activista Arianna López Roque, y el coordinador regional del Instituto Patmos, Leonardo Rodríguez Alonso.
CSW indicó que entre julio y noviembre de 2019, las autoridades detuvieron, sin cargos, a Ricardo Fernández Izaguirre, miembro del Movimiento Apostólico y periodista independiente.
El informe añade que muchos grupos religiosos dijeron que su incapacidad para obtener el registro legal que otorga la Oficina de Asuntos Religiosos y el Ministerio de Justicia impedía la capacidad de los adherentes para practicar su religión. Las autorirdades "continuaron negando el registro oficial a ciertos grupos, incluidas varias iglesias apostólicas, o no respondieron a solicitudes pendientes desde hace mucho tiempo, como las de los Testigos de Jehová y La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (Iglesia de Jesucristo)", subraya el informe.
Leyes que restringen la libertad religiosa
El Código Penal cubano establece que la membresía o asociación con un grupo no registrado es un delito; las penas van desde multas hasta tres meses de prisión, y los líderes de tales grupos pueden ser condenados a hasta un año de prisión.
La ley regula el registro de "iglesias en casas" (residencias privadas utilizadas como lugares de culto). Dos casas culto, como también se les conoce, de la misma denominación no pueden existir a menos de dos kilómetros (1.2 millas) una de otra, y deben proveer información detallada a las autoridades, incluida la cantidad de fieles, las fechas y horas de los servicios, y los nombres y edades de todos los habitantes de la casa en la que se realizan los servicios.
Según CSW, muchos líderes religiosos practicaron la autocensura debido a la vigilancia del gobierno y la infiltración de grupos religiosos.
Por otro lado, la educación religiosa está altamente regulada en la isla y la educación en el hogar es ilegal. En abril de 2019, las autoridades arrestaron y sentenciaron a los defensores de la educación en el hogar Reverendo Ramón Rigal y su esposa Ayda Expósito, por su negativa a enviar a sus hijos a escuelas administradas por el gobierno por razones religiosas.
En julio, el gobierno impidió que los líderes religiosos viajaran a los Estados Unidos para asistir a la Ministerial para promover la libertad religiosa. Según CSW, el 10 de noviembre, las autoridades impidieron que el presidente de la Convención Bautista del Este saliera del país.
Los rastafaris, cuyo líder espiritual permanece encarcelado desde 2012, se encuentran entre los grupos religiosos más estigmatizados y reprimidos en Cuba. El reporte cita un informe del Instituto Patmos que afirma que la música reggae, la forma principal de expresión rastafari, ha sido marginada en la isla y sus bandas censuradas.
"Según Sandor Pérez Pita, conocido en el mundo rastafari como Rassandino (...) los rastafaris son constantemente atacados por las medidas represivas del gobierno contra las drogas", y encarcelados por este motivo aún sin evidencias de posesión o tráfico real de estupefacientes, indica el reporte. Añade que las autoridades cubanas también someten a los rastafaris a discriminación por su ropa y peinados. Los niños en edad escolar son segregados y los adultos sufren la discriminación laboral.
EEUU mantiene vigilancia sobre Cuba
El reporte indica que funcionarios de la embajada de Estados Unidos en La Habana se reunieron brevemente con Caridad Diego, la jefa de la ORA, durante una misa en septiembre de 2019, para celebrar la promoción del arzobispo de La Habana, Juan de la Caridad García Rodríguez, al rango de cardenal, pero "Diego se negó a celebrar una reunión de seguimiento".
Los funcionarios de la sede diplomática estadounidense también "se reunieron regularmente con una variedad de grupos religiosos, incluidos protestantes, judíos, testigos de Jehová, musulmanes y católicos, sobre el estado de la libertad religiosa y las actividades políticas relacionadas con las creencias de los grupos religiosos".
El documento destaca que, tanto en declaraciones públicas como en las redes sociales, los funcionarios del gobierno de EEUU, Incluidos el presidente Donald Trump y el Secretario de Estado Mike Pompeo, continuaron pidiendo al gobierno cubano "que respete las libertades fundamentales de sus ciudadanos, incluida la libertad de religión".
El informe recuerda que el 18 de diciembre pasado, de conformidad con la Ley de Libertad Religiosa Internacional de 1998, el Secretario de Estado colocó a Cuba en la Lista Especial de Vigilancia por haber participado o tolerado violaciones graves de la libertad religiosa.
Religión en Cuba, según las cifras
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